El músculo empresarial hispano se ha convertido en un motor de alta cilindrada para la economía estadounidense en las últimas décadas, especialmente en los años recientes. A partir de datos del Censo, se conoció que los hispanos crean empresas a más del doble del ritmo del resto de la población en EEUU, sumando unos cinco millones de negocios que generan la impresionante cifra de más de $800.000 millones en ingresos anuales. Además de su propulsión económica, las proyecciones demográficas estiman que los hispanos podrían representar un 29% de la población en 2050; por ende, si las firmas hispanas accedieran a capital y contratos al nivel del promedio del mercado, su aporte adicional podría rondar unos $1,4 billones, de acuerdo con JPMorgan Chase. Además, organizaciones empresariales, como la Cámara de Comercio Hispana de los EEUU (USHCC), recuerdan que el tejido empresarial hispano emplea a millones de trabajadores y que el potencial de creación de empleo seguirá creciendo a pasos agigantados si se cierra la brecha de financiamiento.

